EN SECUNDARIA

En secundaria,
un compañero se suicidó en segundo año.
La verdad nunca supimos si fue suicidio o lo mataron...
Lo que si, es que iba muy alterado a la escuela
y se enojaba fácil.

De haber puesto más atención,
creo que hubiéramos avisado...

Lo triste es que yo me prestaba para hacerle bullying también.
Sé que en la secundaria
no hay tiempo de ver al compañero de al lado.
¡Estamos muy ocupados sobreviviendo!

(Todos hacemos bullying en algún momento de nuestra vida).

Lo recuerdo como algo tan surreal… Era un día nublado,
llegaba a la secundaria. Hacía algo de viento.
En los cables de luz había un montón de pájaros negros
que nos mostró la niña más hermosa del salón.
Ella sorprendida por los pájaros,
nosotros por su bella boca,
que todos querían y nadie se atrevía a besar.

Y como a los 15 minutos nos avisarnos del fallecimiento del compañero,
pero a los 10 minutos ya estábamos igual de nuevo.

A esa edad, difícilmente se tiene conciencia de la trascendencia de la muerte.

Fue un lunes... El viernes anterior yo había estado molestándolo.

Lo conocía desde segundo de primaria.
En ese momento no parecía tan alterado
como cuando me lo volví a encontrar en secundaria...
Me sentí mal casi una semana por haberlo molestado.
Aunque lo mío era leve, había otros que si se pasaban de la raya.

Había mitos urbanos que decían
que por culpa de los que lo hostigaban
se había suicidado…
Y luego salió en el periódico una nota que decía que su padre lo había ahorcado.

Hoy, 20 años después, se la verdadera razón de su muerte.

La besó, a ella. La más hermosa del salón.
Pero a ella no le gustó.
La vergüenza de no haberlo sabido hacer bien
fue lo que lo mató.